Este martes la ciudad de Capitán Bado fue escenario de un violento suceso que dejó dos personas muertas y dos vehículos calcinados.

El incidente, que se presume fue un ajuste de cuentas entre grupos criminales, ocurrió alrededor de las 11:30 horas en la calle Palma casi General Díaz, en el barrio San Roque, conmocionando a la comunidad local.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Alxi Javier Escurra Rodríguez, de 25 años y de nacionalidad paraguaya, y Sebastián González Espinola, también paraguayo, de 37 años. Ambos fueron encontrados sin vida en la vía pública al llegar las autoridades. La escena era dantesca: junto a los cuerpos yacían un automóvil Volkswagen Polo Track, propiedad de una de las víctimas, y una camioneta Mercedes Benz de color gris con matrícula brasileña N JDF2JO7, ambos envueltos en llamas.
La Regional de Investigaciones de Amambay y la Dirección de Investigación de Hechos Punibles tomaron conocimiento del hecho tras un llamado telefónico de la comisaría jurisdiccional, que solicitaba apoyo debido a la magnitud del enfrentamiento. La fiscala Ester Giménez, a cargo de la investigación, confirmó que, basándose en las evidencias recolectadas, se trata de un caso de sicariato.
Alxi Xavier Escurra Rodríguez, una de las víctimas, recibió siete impactos de bala, lo que sugiere que era el objetivo principal del ataque. Escurra era sobrino de Felipe Varón Escurra, un conocido narcotraficante de la zona, considerado el «rey de la marihuana» en Capitán Bado, buscado por las autoridades brasileñas por posesión y tráfico de marihuana, con una solicitud de extradición pendiente. Además, Escurra contaba con antecedentes penales por homicidio doloso, extorsión y tenencia de drogas peligrosas, y se encontraba bajo arresto domiciliario.
Según la fiscala Giménez, las víctimas fueron interceptadas por un vehículo Mercedes Benz blindado, que posteriormente fue encontrado incinerado. En el vehículo de las víctimas no se hallaron armas de fuego. La principal hipótesis que manejan las autoridades es un ajuste de cuentas entre grupos criminales.
La fiscala también hizo un llamado a la colaboración ciudadana, destacando la dificultad de la investigación debido al temor generalizado en la población, que impide obtener información relevante. A pesar de las dificultades, la Fiscalía está solicitando el acceso a grabaciones de cámaras de circuito cerrado para tratar de identificar a los autores del doble homicidio.
Aunque en los últimos meses los hechos de sicariato habían disminuido en la zona, la fiscala Giménez mencionó un incidente similar ocurrido días atrás en Brasil, en el que una pareja fue ejecutada. No descartó la posibilidad de que ambos sucesos estén relacionados.
En el incidente, al menos una persona ajena a los fallecidos resultó herida y fue trasladada a un centro asistencial para recibir atención médica.
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