Expectativas inflacionarias superan previsiones oficiales

Agentes económicos locales volvieron a ajustar sus proyecciones para la inflación del 2025, ubicándola por encima de la meta del BCP; esto, por la incertidumbre sobre los precios que sigue pesando sobre el consumo y el ahorro.
Las proyecciones del sector privado respecto a la inflación en Paraguay nuevamente se alejan de la meta oficial del Banco Central del Paraguay (BCP), generando preocupación sobre el comportamiento de los precios en los próximos meses. Según la más reciente Encuesta de Expectativas publicada por la banca matriz, los agentes económicos estiman que la inflación anual cerraría en 4,2% en 2025, superando el objetivo del 4% establecido por la autoridad monetaria.
Aunque la diferencia parece marginal, expertos advierten que este tipo de desviaciones, si se sostienen, podrían influir en las decisiones de política monetaria del BCP, particularmente en un contexto de recuperación económica moderada y condiciones financieras más ajustadas.
Para el mes de mayo, los consultados prevén una inflación mensual del 0,3%, mientras que para junio proyectan una ligera aceleración hasta el 0,4%. En cuanto al cierre del año 2024, la expectativa se mantiene en 4%, en línea con el nivel que el BCP considera óptimo para la estabilidad de precios.
Sin embargo, para el horizonte de 12 y 24 meses, los encuestados anticipan una inflación de 4,2%, lo que refleja una visión más cautelosa hacia el futuro. Esta percepción podría responder a factores como el encarecimiento de algunos bienes importados, las variaciones en los precios de los alimentos y las dudas sobre el comportamiento del dólar.
Tasa de referencia
En cuanto a la tasa de política monetaria, el consenso entre los agentes es que se mantendría en 6% tanto en mayo como en junio. Esta previsión sugiere que, al menos por el momento, el mercado no espera nuevas reducciones en el tipo de interés de referencia, tras un ciclo bajista que acompañó la desaceleración inflacionaria del año pasado.
El mensaje implícito es claro: mientras la inflación no ceda de manera sostenida, el BCP optaría por mantener una postura prudente, sin tomar decisiones que puedan comprometer la estabilidad de precios.
Tipo de cambio y crecimiento económico
Respecto al tipo de cambio, las expectativas apuntan a una cotización del dólar en torno a G. 7.400 para junio, mientras que para fin de año la estimación se eleva a G. 7.450. Estos niveles, aunque estables, podrían verse alterados si se producen shocks externos o cambios abruptos en los flujos comerciales.
En el plano del crecimiento económico, los encuestados mantienen su previsión de expansión del PIB en 3,8% para 2024, una cifra que, de concretarse, consolidaría el rebote tras un año anterior marcado por desafíos climáticos y presión sobre el consumo interno.
Las proyecciones actualizadas reflejan una economía que navega con relativa estabilidad, pero bajo la sombra de una inflación que no termina de alinearse con los objetivos oficiales. Mientras tanto, el Banco Central deberá equilibrar cuidadosamente su política monetaria para no sofocar la recuperación, sin perder de vista su mandato de preservar el poder adquisitivo de la moneda.
El Nacional
